La moda del bronceado es una moda que debe morir. Cada vez son más las famosas que renuncian a dañar la piel para estar morenas. Mi opinión es que el moreno obsesiona y mucho.
Acostumbramos a ver en redes sociales a chicas ultra bronceadas con tonos cinco veces más oscuros que el que tienen en invierno me planteo el daño que he estado haciéndome. Me encanta tomar el sol, considero que es uno de los placeres de la vida, sin embargo, esta moda es pan para hoy y hambre para mañana.
Aproximadamente el 80% del envejecimiento de la piel se debe al sol. La radiación solar afecta directamente al ADN de tus células de forma irreversible y acumulable. Esta exposición crea mutaciones genéticas y además destruye el colágeno del rostro perdiendo así toda elasticidad.
En los últimos años he conseguido perfeccionar una pequeña lista de productos que simulan un bronceado radiante sin tener que tomar ni un rayo de sol.
De menos a más comenzare por St. Moritz, el cuál es el más famoso ya que es económico y funciona bien. He probado de esta marca todos y me quedo con el básico.
Si sois perezosas os recomiendo 100% el St.Tropez Autobronceador Corporal para la ducha, es rápido, funciona y una vez morena solo te lo repites dos veces a la semana para mantener.
Lo mejorcito para el rostro es de James Read. Lo probé en una caja de adviento de Lookfantastic y me pareció ¿Genial? No ¡Maravilloso! Debes usarlo por la noche para poder despertar con un tono caramelo.
La joya de la corona es más cara, pero no huele raro, deja la piel impresionante y además hidrata un montón. Se trata de Institut Esthederm Sun Kissed luz Tan autobronceadora, prometo que no habéis probado nada igual.