Mi pelo en la adolescencia era largo, brillante, oscuro y muy rizado. El problema era que no sabía ni cuidarlo, ni estilizarlo porque a esa edad estas en otras cosas. Tenía un grosor de pelo que tenía que comprarme gomas especialmente anchas para poder hacerme una coleta en condiciones.
Durante ese periodo e intentando deshacerme de todos mis rizos, me pasaba la plancha bastante a menudo pero al tener el pelo tan grueso no se me estropeaba apenas.
Con el pasar de los años fui investigando para dar con una solución más permanente. Debí de ser de las primeras que se hizo un tratamiento de queratina en España. Este tratamiento procede de países latinoamericanos donde el cabello de las chicas es extragrueso, nada que ver con el pelo de las españolas. Me hice el tratamiento y el chico me informó de que se me quedaría super liso y brillante. Desde luego así fue. La queratina es como una silicona que por decirlo de alguna forma cubre todo el pelo y ese brillo que vemos, no es porque tu pelo ahora esté más sano, sino por el producto.
Ingenua de mí, cuando pasaron siete meses y vi mi pelo mucho peor que antes de realizarme nada, creí que necesitaba de nuevo el tratamiento porque claro ¡Es que me lo había saneado un montón!
Me lo repetí. Como siempre mientras te lo aplican, te dicen lo típico: No lleva formol. Te sanea mucho. Procede de productos naturales. Etc Etc Etc
Chicas el grosor de mi pelo quedo a la mitad. La queratina «ahoga» el pelo y la caída se duplica. Los tratamientos de queratina, brasileños y japoneses, están hechos para pelos realmente rebeldes, foscos y muy pero que muy gruesos. Los rizos, por supuesto, no vuelven jamás. Solo queda una pequeña ondulación de lo que eran y solo trabajando al máximo y con mil trucos quedan medio bonitos.
Hace años probé una nueva queratina de la que hablaban maravillas y tonta de mí pensé que habrían actualizado la formula o mejor dicho, no pensé. El efecto que dejan es super bonito, pero las consecuencias a largo plazo son irrecuperables.
Considero que sigo teniendo pelazo. Abundante, brillante y bonito, sin embargo es de un grosor normal y echo de menos el peso de mi cabello.